14 Entonces Faraón mandó llamar a José, y lo sacaron aprisa del calabozo; y después de afeitarse y cambiarse sus vestidos, vino a Faraón.
15 Y Faraón dijo a José: He tenido un sueño y no hay quien lo interprete; y he oído decir de ti, que oyes un sueño y lo puedes interpretar.
16 José respondió a Faraón, diciendo: No está en mí; Dios dará a Faraón una respuesta favorable.
¿Has tenido alguna vez un problema realmente grande?
Tal vez ni siquiera un adulto podía ayudarte. ¡Dios sí puede! Él es sabio y tiene la solución a cada problema.
Sal a la calle y coge una piedra pequeña. Ponla en un lugar donde puedas verla todos los días. La piedra te puede recordar tus problemas difíciles.
Pídele a Dios que te ayude con ellos.
Señor, gracias por tu sabiduría.
Gracias por ayudarme con mis problemas difíciles.
En el nombre de Jesús. Amén.